Ora Pro Nobis

“Porque yo sé los planes que tengo para vosotros”
—declara el Señor—
“planes de bienestar y no de calamidad,
para daros un futuro y una esperanza.
“Me invocaréis, y vendréis a rogarme, y yo os escucharé.
(Jeremías 29:10-12)

Dios Todopoderoso, perdona las veces que te he fallado,
en Ti creo firmemente y de Ti lo espero todo,
no permitas que ninguna tribulación me perturbe,
Señor, mi buen Dios, te pido me des tu amparo y bendición.

Padre providente, rico en bondad y misericordia,
acepta complacido esta sincera oración que te presento,
te pido con toda humildad me acojas bajo tu protección,
mírame con tu habitual bondad y ayúdame.

A Ti, que desde el principio de los tiempos nos has amado,
te suplico no te apartes de mí y me envuelvas con tu Poder,
que nunca me falte tu comprensión y tu auxilio,
dame tu Paz y aleja de mí todo conflicto y necesidad.

Confiando en la paciencia que siempre tienes con tus hijos
y confiando en el cariño con el que nos cuidas día a día,
te pido escuches benevolente mis suplicas,
derrama tu amor y bendición sobre mí
y dame tu poderosa ayuda en esta muy difícil situación:

(mencionar el problema y lo que se desea conseguir)

Altísimo Señor, Padre santo, ven a mi encuentro,
auxíliame, date prisa en socorrerme,
por favor, haz llegar hasta mí cuanto antes
el favor que con inmensa esperanza te he solicitado,
ten piedad de mí y alivia mis cargas y sufrimientos.

Oh mi Señor, Padre Eterno, apiádate de mis difíciles problemas,
te ruego me concedas solución
en el nombre de Jesús, nuestro único Salvador.

Amado Dios lleno de bondad, fuente y origen de toda luz,
ilumina los ojos de este tu siervo-a,
concédeme caminar por la senda del bien
y siempre a la luz de tu Verdad,
fortaléceme para que tome decisiones dignas y honradas
y sepa difundir tu Amor y Caridad entre mis semejantes,
haz que sea mejor persona
para poder llegar al esplendor de tu Gloria
y así sentirme verdaderamente tu hijo-a.

Amen.+

Rezar tres Padrenuestros y tres Glorias.
La oración junto a los rezos se debe hacer con mucha fe
durante nueve días seguidos.