ORACIÓN DIARIA AL ESPÍRITU SANTO.
Es efectiva cuando se presenta una discusión de celos o conflictos conyugales.
“¡Oh, Espíritu Santo! Amor del Padre y del Hijo, inspírame siempre lo que debo pensar, en lo que debo decir y cómo debo decirlo, en lo que debo callar, en lo que debo escribir. Y cómo debo actuar.
Inspírame en lo que debo hacer para procurar vuestra Gloria, el bien en las almas y mi propia santificación.
¡Oh, Espíritu Santo! Ayúdame a ser bueno y fiel a la Gracia de Dios e inflama al mundo que se materializa en el fuego de Tu Amor”.
“¡Oh, Espíritu Santo! Amor del Padre y del Hijo, inspírame siempre lo que debo pensar, en lo que debo decir y cómo debo decirlo, en lo que debo callar, en lo que debo escribir. Y cómo debo actuar.
Inspírame en lo que debo hacer para procurar vuestra Gloria, el bien en las almas y mi propia santificación.
¡Oh, Espíritu Santo! Ayúdame a ser bueno y fiel a la Gracia de Dios e inflama al mundo que se materializa en el fuego de Tu Amor”.
“¡Oh, Espíritu Santo! Amor del Padre y del Hijo, inspírame siempre lo que debo pensar, en lo que debo decir y cómo debo decirlo, en lo que debo callar, en lo que debo escribir. Y cómo debo actuar.
Inspírame en lo que debo hacer para procurar vuestra Gloria, el bien en las almas y mi propia santificación.
¡Oh, Espíritu Santo! Ayúdame a ser bueno y fiel a la Gracia de Dios e inflama al mundo que se materializa en el fuego de Tu Amor”.